Entrevista a Don Luis Ruiz de Gopegui (primera parte)

Con un poco de retraso publicamos, por fin, la entrevista que hicimos, o mejor dicho, que hicisteis todos a Don Luis Ruiz de Gopegui el pasado mes de Diciembre. Antes de nada, quiero agradeceros a todos los que participasteis en su momento enviando preguntas para Gopegui, y también, como no podía ser de otro modo, al propio Don Luis que nos atendió maravillosamente una vez más. También quiero agradecer a Lara que transcribiera toda la entrevista, sin cuyo trabajo estos posts no hubieran sido posibles.

Al ser tan extensa, hemos dividido la entrevista en dos artículos.

Don Luis Ruiz de Gopegui

MG La primera pregunta es de Moonwalker que dice: “ Don Luis, ¿con qué astronautas del programa Apolo tuvo usted más relación? ¿Puede contarnos alguna anécdota curiosa?”.

LRG: Era muy difícil hacer amistad con los astronautas que fueron a la Luna porque, o bien andaban muy ocupados con simulaciones para próximas misiones, o bien, después de llegar a la Luna habían dejado la NASA y estaban en empresas en cargos muy importantes, y claro, no ibas a ir allí a hacerles una entrevista. Había gente, por ejemplo Borman, que fue el que orbitó la Luna, pues, que nada más orbitar la Luna le hicieron presidente de una de las líneas aéreas más importantes de EEUU. De todas formas, cuando íbamos a reuniones en los EEUU, ya fuera a Florida o a Houston o a Washington, siempre en las reuniones venía un astronauta y charlaba un rato con nosotros. Era algo formal así que no podías hacer amistad con ellos.

Tripulación Apolo 16. De izq. a dcha: Mattingly, Young y Duke.

Una vez vinieron a España los del Apolo 16. Pero sólo vinieron dos. Eran Mattingly y Duke. Duke era el que habló con los astronautas de la Luna en el Apolo 11. Siempre hay un astronauta en Houston encargado de las telecomunicaciones, es el único que puede hablar con los astronautas. Vinieron estos dos. Estuvieron dos días en Madrid, y un día conseguí rescatarlos de la embajada, porque en la embajada los absorbían. Iban a Fresnedillas cinco minutos y luego desaparecían. Y me los llevé a comer a Cándido, a Segovia, donde el cochinillo. Cándido todavía vivía y nos hizo la demostración esa de cortar el cochinillo con un plato. Ellos no hablaban español así que yo iba traduciendo lo que decía Cándido a ellos y lo que ellos decían, y entonces, yo le dije a Cándido: “Hombre, trae el libro de firmas, de visitas, porque estos astronautas han estado en la Luna”. Cándido dijo: “Sí, sí, lo traigo encantado, pero yo no me creo que hayan estado en la Luna”. Yo me eché a reír. Creo que fue Duke el que me dijo: “No nos traduzcas, sabemos lo que está diciendo. Que no se cree que hemos estado en la Luna, qué le vamos a hacer”. Y bien, firmaron, que habían estado en la Luna pero no sé qué hizo Cándido con aquella hoja del libro.

MG: Me surge una duda a raiz de lo que ha dicho sobre la figura del Capcom, el astronauta que sólo puede hablar con los otros astronautas, eso ¿por qué es así?

LRG: Bueno, vamos a ver. Eso tiene que estar enormemente controlado. En Houston, por ejemplo, hay 40 o 50 consolas. Y claro, si no se controla mucho eso sería un guirigay. Entonces lo controlan mucho, y como los astronautas pasan momentos dificiles, no hay duda de que quién mejor los atiende es otro astronauta. Realmente no es el que mejor los atiende, sino el que les da más tranquilidad. Entonces hay un astronauta,  que es el capcom, que tiene contacto con todas las secciones. Cada sección tiene una consola en la que hay tres personas, pero es una sola la que habla, los otros sólo oyen. Entonces viene el técnico y dice por ejemplo: “Duke, se ha colgado el ordenador” como le dijeron, y Duke inmediatamente llama “Computers, ¿qué pasa?” y le contestan. De esta forma es lo mejor y lo que más tranquiliza a los astronautas.

Control de Misión en Houston durante el Apolo 13

MG: Aprovecho también para hacerle otra pregunta. ¿Ha estado en el control de misiones de Houston?

LRG: Sí, sí, he estado varias veces porque el control de Houston no está operativo todos los días, sólo si hay alguna nave espacial ya que entre vuelo y vuelo a lo mejor pasaban dos meses. Y en esos dos meses se hacen simulaciones, y cuando había una simulación nosotros íbamos a Houston. A mí me llevaron de centro en centro para entrenarme un poco. Me llevaban a Houston y me sentaban en una consola que no estuviera ocupada y mientras ocurre la simulación, estás escuchando lo que pasa. Es un centro grandísimo y además tiene otro de reserva por si ocurre un corte catastrófico, inmediatamente se conecta con  Washington DC o con el Goddard Space Flight Center, que es donde yo iba muchas veces también, pues allí tienen otro centro equivalente, un poco más reducido pero equivalente y hacían simulaciones también.

MG: Supongo que sería excitante, estar allí en el control de misiones sentado.

LRG: Hombre, sí. Sobre todo para mi que al principio era un pardillo. Yo estuve aproximadamente dos años en Robledo y en Cebreros. Era ingeniero jefe de los sistemas de radiofrecuencia de Robledo y de Cebreros. Al principio esas dos estaciones eran gemelas, y los equipos eran exactos, todo era igual. Y de allí me trasladaron a Fresnedillas, y claro, visitar Houston imagínate… El seguimiento de las naves no tripuladas es completamente distinto al de las tripuladas. En JPL que es donde está el control de las naves no tripuladas hay veinte consolas, en el otro lado hay 45.

MG: Antonio dice: “Le preguntaría a Gopegui si recibió alguna formación específica de NASA en Estados Unidos para luego desarrollar su trabajo en la estación de Fresnedillas cuando el programa Apolo”.

LRG: Sí, yo estuve en dos ocasiones en EEUU siguiendo cursos. La primera ocasión era un curso total, era un aula, te sentabas allí, había 4 ó 5 miembros de NASA como alumnos. Era un curso de dirección especializado donde nos hacian exámenes. Ese curso se desarrolló  en Goddard Space Flight Center, al lado de Washington D.C. Lo pasé muy bien en ese curso, los de NASA eran muy simpáticos, y alguno de mis compañeros después ocuparon puestos con los que yo tenía que estar en contacto con ellos, y muy bien, me gustó mucho.

Luego en otra ocasión hice una especie de cursillo de unos 20 días, pasando por distintos sitios. Primero en Goddard, que era donde habían diseñado casi todo el equipo de las estaciones. Después pasé a la sección de receptores, luego a la sección de computadores, transmisores, antenas. Y luego fui a otros centros. Fui a Houston y a Cabo Kennedy en Florida. En esos centros me enseñaban cosas e hice buenos amigos, fue muy interesante.

La Tierra en primer plano y al fondo la Luna

MG: Francisco dice: “Una o dos preguntas tontas. No hace mucho vi el documental titulado “Si no tuvieramos Luna”, creo que también está en youtube, en el que se explicaban las consecuencias de la desaparición de la Luna sobre la Tierra, ¿lo conoce? ¿qué le parece? A mí me resultó un poco sensacionalista, sin embargo a continuación me hacía la siguiente pregunta: ¿y qué sucedería si tuviéramos dos o más Lunas tal y como ocurre con muchos otros planetas?

LRG: Esta es una pregunta de mecánica celeste, y yo no soy especialiste en mecánica celeste, así que voy a decir lo que yo entiendo, pero no es una opinión de un gran conocedor del tema. La influencia de la Luna en la Tierra es enorme, porque en el Sistema Solar no se da ningún otro caso como éste. Si Júpiter tuviera una luna del tamaño proporcional al de nuestra Luna y la Tierra, esa luna sería mucho más grande que nuestra Tierra. Así nos damos cuenta de la gran influencia de la Luna sobre la Tierra. Esa influencia, que yo sepa, se nota principalmente en que estabiliza el eje de rotación de la Tierra. El ángulo que mide el eje con el plano de rotación, es decir, con el plano en que se mueve la Tierra. Gracias a la Luna ha variado dos o tres grados en los últimos dos siglos. Esto hace que la Tierra tenga un clima relativamente suave. Si el eje cambia mucho, los polos cambiarían completamente y la vida desaparecería. Para que la vida subsista por muchos años es necesario que haya una luna grande que estabilize el eje de rotación. Aparte de esto la Luna tiene otros efectos como son las mareas,. Pero el principal efecto es la estabilidad del eje de rotación.

MG: Lara dice: “¿Qué opina de la cancelación del Programa Constellation y cómo cree que va a afectar a la hegemonía de los americanos en el espacio? ¿Cómo cree que va a quedar el panorama espacial teniendo en cuenta lo fuerte que vienen pisando agencias espaciales como la china?

LRG: La cancelación de Constellation me ha parecido un auténtico disparate. Si no hubiera suficente dinero disponible para ese programa, lo que se debía haber hecho es alargarlo en el tiempo, que es lo que se hace siempre. Si hemos pensado hacerlo en diez años, pues hacerlo en 15. Pero nunca cancelarlo. Creo que lo que se ha propuesto de ir a un asteroide, en lugar de ir a la Luna y luego a Marte, me parece un disparate. Lo de Marte lo dicen siempre por si cuela, como en el mus.

Respecto a lo que dices del programa espacial, te voy a dar unas cifras, porque son muy esclarecedoras. El gobierno de los EEUU, en total, en el espacio gastó 61.100 millones de dólares al año, juntando NASA,  DOD que es el Departamento de Defensa y otras agencias, juntándolo todo lo que se gastó en el año 2009 fue de 61.100 millones de dólares. El resto del mundo entero: Rusia, Japón, Europa, China, India, etc, gastaron 21.700 millones de dólares en el mismo año. Tres veces menos. Si quitas lo que gasta Rusia, Japón, Europa, India, pues China gasta 8 pesetas, o sea que no hay que preocuparse por China. La propaganda habla mucho, dice que van a ir a la Luna, e irán, dentro de 15 años, es decir, con 60 años de retraso. No es preocupante. Lo que sí es preocupante es que América no se meta en programas más prometedores, se mete en programas de segundo orden.

MG: Me surge una pregunta en relación con esto. A lo mejor los americanos lo que buscan es cooperar con otras agencias como estan haciendo con la Estación Espacial Internacional, para ver si los demás se implican un poco más y entre todos podemos afrontar un objetivo más ambicioso ¿no?

La Estación Espacial Internacional (ISS).

LRG: Como la superioridad es tan grande, NASA no se fia mucho de los otros. NASA empezó haciendo satélites de comunicaciones, pero en cuanto se vió que eso era un gran negocio automáticamente lo pasó a la industria. No quiere involucrarse en negocios porque entonces es competencia desleal, “yo con dinero de los contribuyentes fabrico satélites más baratos que los otros”. NASA ahora está pensando que el asunto de los cohetes empieza a ser un asunto comercial y está intentando que los cohetes lanzadores pasen a la industria privada, para liberarse de hacer cosas rutinarias que no son de investigación científica. Esto es lo que yo creo que está intentando, no cooperar demasiado con los demás, porque entonces esto sería dar el negocio de los lanzadores a Rusia o a Alemania o a Europa o a Japón. Ellos quieren competir,  por ejemplo, con los europeos que  tenemos el cohete ARIANE.

Amerizaje del Apolo 13 en el Pacífico Sur el 17 de abril de 1970.

MG: Lázaro R dice: Yo quiero saber cuál fue el momento más excitante de Gopegui en el programa Apolo. ¿Fue cuando Armstrong pisó la Luna o fue otro momento? También querría saber cuál fue el momento más dramático o triste y si se llegó a emocionar. Gracias.

LRG: Para mí el momento más excitante en el que confieso que lloré fue cuando los astronautas del Apolo 13 cayeron el agua. Aquella misión fue un sufrimiento continuo porque se les oía hablar, estaban muertos de frío, muertos de hambre, no tenían nada, no se afeitaban… y oías en Houston como estaban calculando la trayectoria más corta para que llegaran. Yo sinceramente no creía que iban a llegar con vida. Ese momento fue mucho más excitante que el Apolo 11, porque en el Apolo 11 yo estaba muy involucrado en el follón que había en la estación y no me dio tiempo de emocionarme, en cambio en este sí que me dió tiempo.

Luego, el momento más triste para mí fue cuando suspendieron el Programa Apolo, cuando anunciaron que la ultima misión iba a ser la del Apolo 17, estábamos en el Apolo 14 me parece. Y me pregunté y ahora ¿qué vamos a hacer? ¿Quién va a ir a la Luna? Irán los rusos, nos ganarán otra vez, en fin, fue el momento más triste, yo me había hecho ya un fan del Apolo, y de pronto no hay Apolos.

2001: Una Odisea en el Espacio

MG: General Espartero dice: “Mi pregunta es más o menos la de siempre, ¿para cuándo nos planteamos como especie, es decir, para cuando es viable o puede serlo según los recursos actuales los viajes tripulados a la Luna en primer lugar, y a Marte en segundo lugar? ¿Tienen sentido los asentamientos humanis estables tipo colonias fuera de la Tierra? ¿Todavía es ciencia ficción? Parece que el “big leap” que decía Armstrong se quedó ahí, pero que desde entonces no ha habido muchos avances, por cuestiones tecnológicas o por cuestiones políticas.

Los asentamientos humanos fuera de la Tierra son de momento un asunto de ciencia ficción. No creo ni siquiera que nuestros nietos o nuestros tataranietos los vean. Me refiero a asentamientos grandes, si es en la Luna una base de cuatro astronautas o científicos eso si, pero un asentamiento en el espacio, no digamos en Marte, yo no lo veo viable. Además es que no creo que tenga sentido. ¿Para qué vale un asentamiento de 400 personas en la Luna?, ¿para hacer turismo espacial, costando cada billete de ida y vuelta 15 millones de dólares? Yo veo una base pequeña de 5, de 10 astronautas y científicos para hacer investigación, pero otra cosa no la veo.

Por otro lado, la carrera espacial no se ha parado, lo que pasa es que se dió un primer paso muy pronto de llegar a la Luna y luego, toda la gente un poco profana pues dijeron “pasado mañana llegamos a Marte”. Cuando digo poco profana incluyo al Presidente de EEUU, que cuando llegaron a la Luna dijo “Antes de 1980 llegaremos a Marte”. Creo que fue Nixon. Los temas estos son de dimensiones astronómicas, llegar a la Luna es un paso y llegar a Marte son 520.000 pasos. Es una diferencia astronómica. El programa no se ha parado, pero avanza pasito a paso y en muchas direcciones. Se está haciendo muchísimo en telescopios espaciales, muchísimo muchísimo, pero la gente no lo ve tanto como el poner el pie en la Luna.

El problema es, sin duda, político, mejor dicho, es económico. Y económico es siempre político.  Una cosa que es muy barata no hay que pedir permiso al gobierno para hacerla, pero una cosa muy cara sí. Así que con los políticos hemos topado.

ANOTACIONES RELACIONADAS:
0 0 votes
¡Puntúa este artículo!
guest
0 Comentarios
Inline Feedbacks
View all comments

Utilizamos cookies de terceros para generar estadísticas de audiencia y mostrar publicidad personalizada analizando tu navegación. Si sigues navegando estarás aceptando su uso.